Los transportes marítimos son una actividad industrial llena de incertidumbres. No solamente están expuestos a los peligros del mar, sino también a las decisiones y alteraciones políticas. Además, los transportes marítimos son muy vulnerables a la competencia y gozan de una protección geográfica solo limitada, puesto que la «fábrica», puede desplazarse fácilmente para producir allí donde sea necesario.
Evolución histórica
La historia del transporte marítimo y el desarrollo portuario se remonta a más allá de 3.500 años a.C. A lo largo de los siglos, el transporte de mercancía a través de los mares, ha ido evolucionando de acuerdo con las necesidades del comercio mundial y de la capacidad técnica para construir barcos más grandes y eficientes instalaciones portuarias adecuadas para la manipulación de mercancías.
Hasta hace dos siglos la actividad comercial era ejercida por los armadores, dueños del buque y de las mercancías que se cargaban o descargaban barqueando, para depositarlas en sus factorías en espera de venderlas. Los puertos sólo eran fondeaderos y en ellos los vientos eran más temibles que las olas, de las que los navíos podían defenderse varando en las playas.
En la última mitad del siglo pasado, cuando el comercio estaba ya claramente diferenciado del transporte y los vapores eran cada vez mayores y más rápidos, el barqueo resultaba antieconómico por requerir tiempos en puerto mucho mayores que en viaje. Hubo que construir muelles, no especializados y, por tanto, aptos para cualquier tráfico y crear organismos rectores que se ocupaban sobre todo de la obras y muy secundariamente de la administración y explotación. Todos los puertos del mundo venían a cubrir la misma función comercial y, a parte de sus características físicas, apenas diferían más que en el tamaño.
En los últimos cincuenta años el tráfico marítimo internacional ha aumentado enormemente, los buques se han especializado para transportar unas u otras mercancías; las grandes industrias tienen forzosamente que instalarse en los puertos o muy cerca de ellos para que el reducido coste unitario de las materias primas importadas no se vea recargado por largos transportes terrestres; los grandes petroleros y mineraleros por su calado, solo pueden entrar en muy pocos puertos, la manipulación se ha mecanizado, etc. Por eso en los grandes puertos, la función industrial prima sobre la comercial, la explotación sobre la construcción, ha habido que recurrir a muelles muy especializados, a puertos de distribución o a instalaciones off-shore y así, los actuales puertos, de organización y funciones muy diversas, han llegado a ser verdaderas empresas, tan complicadas como cualesquiera otras y tanto más importantes para la economía nacional.
En este contexto, el transporte marítimo, modo básico en las rutas intercontinentales, ha experimentado cambios estructurales profundos en la última década, para satisfacer los nuevos desafíos impuestos por el mercado. (Producción y comercio).
Impacto medioambiental
El transporte marítimo es el mas respetuoso con el medio ambiente que los demás medios de transporte. Entre otras ventajas, destacan el bajo consumo en combustible por unidad de longitud o carga, una menor contaminación ambiental y menos ruido y accidentes.
Usos mas generales del transporte maritimo
Por mar, hay dos tipos: carga general y graneles.
La carga general se presenta en estado sólido, líquido o gaseoso y que puede ser tratada como unidad. Usualmente se transporta en buques de líneas regular y puede presentarse para su traslado como carga fraccionada (mercancía que por su tipo de embalaje se maneja individualmente como sacos, cajas, bultos, etc.) y carga unitarizada (en pequeñas cargas, uniformes o heterogéneas, se unen para formar una unidad, pudiendo presentarse a través de paletas (palet) o tarimas, en contenedores).
La carga a granel es un producto que es embarcado suelto en la bodega. En ocasiones se habla que los automóviles son embarcados a granel, lo que significa que el buque tiene una sola carga o tiene cierta carga como predominante. Este tipo de carga lo constituyen grandes volúmenes o tonelajes homogéneos que no requieren de embalaje.
La carga peligrosa son las capaces de causar daños a las personas, a cargas contiguas o al medio de transporte. Son un gran número de productos químicos orgánicos e inorgánicos, materias primas artificiales, productos fotográficos, químicos-agrícolas, pólvora, explosivos, colorantes, pinturas, barnices, productos de perfumería y cosméticos, ladera, corcho, farmacéuticos, derivados y compuestos de todos los anteriores y desperdicios.
La carga valiosa o ad-valorem son artículos que tienen un gran valor intrínseco, tales como joyas, obras de arte y metales preciosos. Se transportan en recipientes de seguridad.
Animales en pie es el transporte de animales vivos.
La carga pesada y voluminosa son aquellas piezas o bultos cuyo peso y/o dimesiones exceden de las que se manejan con equipo convencional.